en formato white label para mejorar la oferta a sus clientes. En este grupo están, por ejemplo, las startups que utilizan la inteligencia artificial (IA) para potenciar el uso de datos generados por los bancos, como es el caso de DILE: “Cuando quieres generar una transformación completa tienes que cambiar muchos procesos desde cero y es donde nosotros estamos. Le decimos, por ejemplo, a un banco por qué su on-boarding no es eficiente y lo que tiene que transformar, a nivel de las diferentes tecnologías de la información, para hacerlo eficiente. Eso implica reestructurar procesos y tecnología dentro de la organización. Nosotros marcamos la diferencia con nuestro propio motor de IA, implementado sobre herramientas de automatización, robótica y nuevos paradigmas de programación”. E. Marín, cofundador de DILE. Conversación institucional, 12 de febrero de 2018 Las segundas realizan actividades que compiten con los bancos y utilizan la tecnología para ofrecer un servicio más rápido y más barato para los clientes. En este grupo están los emprendedores que desarrollan aplicaciones que atienden las mismas necesi- dades que una institución financiera: pagos, transferencias, inversiones o créditos. “Existen dos tipos de FinTech, las challengers y las proveedoras de servicios. Creditas pertenece al primer grupo, ya que quieren un pedazo del pastel que los bancos manejan. Sin embargo, eso no significa que no puedan y, más aún, requieran colaborar”. S. Furio, fundador de Creditas Conversación institucional, 26 de febrero de 2018 Las terceras introducen tecnologías que pretenden cambiar significativamente las re- glas del juego de la industria, como, por ejemplo, los registros distribuidos —distributed ledger technologies— denominados blockchain que permiten realizar transacciones seguras sin necesidad de intermediarios. UN CAMINO DE DOBLE SENTIDO 43
